Entré en el Lidl y la vi, costaba 20 euros, y me pregunté ¿Como he podido vivir hasta ahora sin ella?. La compré, una encuadernadora térmica.
Llegue a casa y recobré la cordura. ¿ Para que demonios quiero yo esto? Si alguna vez necesito encuadernar algo lo llevaré al work center que lo hacen divinamente.
Mañana la cambiaré por patatas.
¿Por que no seré capaz de resistir esos impulsos estúpidos?
14 comentarios:
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(¸.•´ (¸.•´ (¸.•´¯`•-->¡¡ Con Amor te saludo ¡¡(¯`v´¯)
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(¸.•´ (¸.•´ (¸.•´¯`•-->Gracias por visitar siempre mi blog.
Sucede. Bien por tí que has reaccionado a tiempo.
Qué bueno el haberte recuperado en la bloguería.
Besos
Es verdad muchas veces compramos por impulso lo bueno que te lo cambian. Besos tía Elsa.
Jajaaja, Mª Jesús, estos impulsos nos hacen más humanos. A mí también me encanta comprar material de oficina, tengo el despacho lleno de cajas de clips, blocs de notas, paquetes de cartulinas...y tampoco sé muy bien qué hacer con ellos.
Besotes.
No la devuelvas, María Jesús, sin duda que en el futuro te será útil y que ahorrarás dinero si no llevas el trabajo al workcenter.
No la devuelvas.
Creo que a todos nos pasa eso de comprar por impulso. Coincido con Fernando: no la devuelvas, si ya la tienes te puede ser útil. Hasta podría generarte un ingreso si encuadernas para otros.
Ja,ja, A mi me ha sucedido en varias ocasiones. ¿porqué compramos algo que estamos seguros de utilizar y luego se queda en el olvido, comprobando amargamente que no se ha usado ni siquiera una sola vez?
Abrazos
María Jesús!
Voy a España durante unas semanas en el verano!
Espero que nos podamos ver, voy a tener clases pero seguro podré escaparme una tarde para tomarnos un café!
Por cierto que he decidido volver al blog, me gusta mucho escribir y últimamente sólo lo hacía en un cuadernito que tengo por ahí!
Te dejo mi correo y así podemos platicar más a gusto sin hacer mucho ruido en los comentarios del blog!
Muchos saludos!
Olvidé poner el correo: m.sanchezcamarena@gmail.com
Uala, qué cacharrajo más molón. Yo le echaría las patatas dentro a ver qué pasa!!!!
Ay Maria Jesús, no he podido evitar reirme con tu post. Cuando nos convencemos de algo así es gracioso no?
Besos
Me reí mucho porque nunca se me hubiera ocurrido comprar una encuaderandora.
Y porque cuando lo pensé mejor, la verdad es que me vendría bárbaro para encuadernar todas esas colecciones que vienen junto al diario, y que me da fiaca llevar a encuadernar (además de lo que cobran) pero por otro lado me da lástima tirar.
Igual soy la primera en entusiasmarme con cada cosa, que mejor no te cuento!
Besos!
No sabes como te entiendo, niña y que alegría leerte de nuevo. Ya mereció la pena el trasto ese, jajaja...
Estoy en la playa con el portátil escanyao, esta noche me dejaron uno que he de devolvera primera hora. No puedo escribir más.
besitos
Mary, es un placer visitarte.
Alemama no escribía por falta de tiempo, pero os visitaba a todos.
Tia Elsa, si, pero no deja de ser una tontería ¿no?
Laurita, al menos el material de oficina ( que a mi tambien me gusta comprar) le puedes ir dando salida, pero ¿una encuadernadora?
Fernando, no la he devuelto. Lidl no es un super al que vaya habitualmente por su lejanía y mis hijos se han dedicado a encuadernar t0odo papel que estuviera guardado en casa.
Gabriela, no se me había ocurrido. Por cierto, tengo problemas con los comentarios en tu blog, no me entran.
Angelo, a mi tambien me ha pasado y termino regalandolo.
Mariana ¡Que bien que hayas vuelto!
Me encantará conocerte. Nos escribimos.
Pianista ¿crees que las freirá?
Soñadora, felizmente no son caprichos de mucho precio.
Lola, llevas razón, voy a coger todos los fasciculos que tengo simplemente metidos en las tapas y se los voy a dar a mis carrochos para que se entretengan en algo útil. Se han dedicado a encuadernar sus dibujos del kinder.
Militos, nos leemos. Un beso fuerte.
Muchas gracias a todos.
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