sábado, 14 de septiembre de 2013

Anécdotas



Sábado y trabajando, lo que hace la crisis. Dicen los periódicos que las loterías tienen mucho trabajo, que ahora juega mucha gente que antes no jugaba, y es verdad, concretamente yo trabajo el doble, lo que pasa es que gano la mitad y no oigo nada más que penas a mis clientes.

He tenido que comprarme un bolígrafo detector de billetes falsos, que hay quien utiliza su ingenio para robar a los demás, y lo hacen estupendamente, son casi perfectos, la única capaz de detectarlos es la máquina del banco.

Hoy han intentado estafarme con el truco del minusválido y el cambio. Viene uno en silla de ruedas y se hace una apuesta de un euro que te paga con un billete de cien y ahí empieza el truco: "¿me puede cambiar esto por un billete de cincuenta?", y ahora con otros cincuenta ¿me devuelve el de cien?,; si le haces caso, te lía y te estafa en los cambios cincuenta euros, y si lo despachas con viento fresco, quedas delante del público ( siempre lo hacen cuando está la administración llena de gente) como la desaprensiva que no ayuda al pobre hombre encima que va en silla de ruedas.

Anécdotas de estas hay para no acabar de contar, pero gracias a Dios tengo trabajo, que es el bien más cotizado hoy día.


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11 comentarios:

Unknown dijo...

Desde luego, hoy podemos decir aquello de... quién tiene un trabajo, tiene un tesoro.

El que no lo tiene o se dedica "al trabajo de otros", se introduce de lleno en la picarersca delictiva.

No cuarenta...¡cien ojos, hay que tener! y procurar encima, que el que quede bien, no sea el delincuente.

Besos.

Luisa dijo...

Pero amiga mía!!!!
¿Cómo acaba la anécdota?
¿qué has hecho?
Besillos malagueños

Gabriela dijo...

Debo entender que no caíste en el truco del hombre en la silla de ruedas. Hay que tener 20 ojos en circunstancias como la que cuentas.

Aprendiz dijo...

Me ha encantado la frase de la foto, me la copio pa soltarla en cualquier oportunidad...;-p

Fernando dijo...

Siempre vamos con temor, María Jesús: hasta en comercios que parecen respetables te intentan engañar con la mercancía o con el cambio. Y, como tú dices, si uno está al otro lado del mostrador, también ha de tener mucho ojo.

Una lástima.

maria jesus dijo...

Así es Yeste.

Luisa la anécdota acabó en que le mandé a "escardar cebollinos" (frase de mi padre)

Gabriela no caí en el truco de la silla de ruedas, pero hoy me han metido una moneda de dos euros falsa, no se puede estar todo el tiempo con cien ojos

maria jesus dijo...

Aprendiz a mi también me hizo gracia. La saqué de Facebook

Fernando creo que hay más de los que quieren engañar al comerciante . Yo he visto levantar a un niño de una silla de ruedas y meterle debajo unas camisetas, en Carrefour

Unknown dijo...

Enhorabuena.

Unknown dijo...

Gracias por tu visita, lindo blog, Un beso.

PEPE LASALA dijo...

Hay muchos timos, y hay que tener mucho cuidado porque hay verdaderos artistas del ingenio, espero que no cayeses. Un fuerte abrazo y feliz fin de semana amiga.

AleMamá dijo...

Sí, aunque trabajes el doble tienes trabajo y eso es para agradecerlo todo el tiempo, con crisis o sin ella.
Besos, M. Jesús.